El espectáculo «Violeta del Alma» fue creado por el reconocido coreógrafo Óscar Ramírez, fundador y director artístico del Ballet Folklórico Antumapu de la Universidad de Chile, que logró plasmar la vida de una de las más grandes artistas chilenas en esta obra musical que regresa al Teatro NESCAFÉ de las Artes el viernes 18 de agosto.
«Violeta del Alma» cuenta con la participación de 14 músicos y 26 bailarines que invitan al público a celebrar el legado de una artista incomparable.
Esta puesta en escena implicó un trabajo arduo de investigación que incluyó extensas conversaciones con el Eduardo “Lalo” Parra, hermano de Violeta, quien analizó con ellos su infancia y les entregó versiones inéditas de canciones que los hermanos Parra interpretaban en el circo, quintas de recreo y diversos restoranes donde se presentaban.
“Violeta del Alma” recibió en el año 2010 el Premio Altazor a la Mejor Coreografía y esto es algo que llena de orgullo a Óscar Ramírez, quien conversó con nosotros sobre el avance que ha tenido la producción durante sus años en escena y el valor que tiene la figura de Violeta Parra, tanto para él como para el mundo.
¿Cómo es interpretar las letras de Violeta Parra en una coreografía de danza?
Es un proceso fundamental, basado primero en el estudio y sobre todo en el contenido de las canciones de Violeta Parra. Afortunadamente es tanta su versatilidad artística que uno como coreógrafo puede inspirarse en su música, pero también en su letra y fundamentalmente en su expresión. Hay elementos sustanciales de su creación musical que te permiten entregar, desde el punto de vista de la danza, una visión muy auténtica de lo que es la danza folklórica chilena. Están sus recopilaciones de campo, en términos de la cultura mapuche, o sus inspiraciones en el minero del norte o de la cultura chilota. Todo eso te permite crear expresiones de movimiento y de danza que tengan que ver justamente con este patrimonio coreográfico.
¿Qué significado tiene Violeta Parra para su carrera artística?
Para mí Violeta ha sido una fuente de inspiración muy grande y cada vez que repaso su vida veo que hay más elementos que son dignos de poder valorar y de proyectar. Esta obra ha sido uno de los mayores logros de mi carrera. Fue premiada con el Altazor en 2010 y es que son tantas las posibilidades que te da Violeta Parra con su música, su vida y el haber tenido contacto desde niña con diferentes expresiones de la cultura folklórica chilena. Eso te permite buscar elementos que realmente son complejos de escenificar.
Según la experiencia que han tenido como compañía al presentarse fuera de Chile, ¿qué significado creen que tiene Violeta Parra en el mundo?
Es increíble cómo nos ha representado tan bien esta mujer como una artista realmente prolífica. Nosotros hemos tenido la suerte de estar en algunos países donde uno nombra a Violeta Parra y es como nombrar a un futbolista que está de moda. En Argentina, también en Grecia, es muy reconocida, y para qué decir en Francia. Han sido experiencias realmente increíbles de cómo el nombre de una mujer chilena puede estar tan enraizado dentro del contexto de la gente del mundo.
Desde septiembre de 2010, cuando se presentaron por primera vez en el Teatro NESCAFÉ de las Artes, hasta el presente, ¿qué cosas ha ganado “Violeta del Alma”?
Bueno, cada vez que yo reviso el material que hemos puesto en escena, siempre he tratado de seguir puliéndolo y de poder hacerlo todavía mucho más significativo, en todo sentido. Hemos tenido algunas renovaciones en términos de vestuario y utilería, hemos ido mejorando la interpretación musical, incorporando sonidos nuevos. Para mí esta obra va a estar siempre en un proceso permanente de revisión, no se puede quedar ahí, hay muchas cosas que se pueden, todavía, incorporar.
¿Qué peculiaridades tiene presentar este show en el Teatro NESCAFÉ de las Artes?
Es muy significativo. Pensemos que el Teatro NESCAFÉ de las Artes se identifica por poner en su parrilla números artísticos relevantes, pero no sólo en la forma, sino que también en el contenido, así que para nosotros es muy importante que el Teatro haya tomado la obra de Violeta Parra como parte de su conmemoración. Pensamos que es un recinto que, al mismo tiempo de dar un buen espectáculo, permite que la gente verdaderamente se vaya con un conocimiento para la casa.
¿Con qué se va a encontrar el público que venga a ver ‘Violeta del Alma’?
Esta obra es muy integral, y cuando digo integral es porque tratamos de dar una visión de toda la vida de Violeta Parra, desde su niñez hasta el día de su muerte. Lógicamente, recorremos la vida de Violeta en todas sus dimensiones: hay diferentes etapas que han sido muy marcadas dentro de su vida y el público va a poder captar realmente la esencia de lo que ha sido y de lo que fue, desde sus inicios como artista, pero también como estudiosa e investigadora. Profundizamos en diferentes aspectos de la Violeta, como es su gran versatilidad como artista, como interprete en guitarra, bailarina, poeta, tantas facetas artísticas, pero a la vez otros puntos de su vida, como el amor y desamor, los triunfos y logros, la visita al Louvre de París y tantas cosas que ella realizó.
Ballet Folklórico Antumapu – «Violeta del alma»
Viernes 18 de agosto – 20:30 horas
Entradas a la venta en Ticketek y sin cargo por servicio en boleterías del Teatro y en el Centro de Atención de la Comunidad de las Artes (Av. Providencia 1266) con descuento para socios.
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