A 28 años de la muerte de su padre, Ismael Oddó prepara un lanzamiento muy especial. Se trata de Canciones con mi Viejo, un disco que recopila antiguas grabaciones en cassettes de Willy Oddó, que él encontró, trabajó para mejorar su calidad, sumó otros músicos e incorporó su propia voz y guitarra. El resultado es definido como su primer álbum como dúo y tendrá su estreno en vivo el próximo jueves 19 de marzo en nuestra sala.
«Canciones con mi Viejo» presenta 10 temas grabados por Willy Oddó que tras un proceso de remasterización sumaron la voz de su hijo y a otros músicos invitados.
Ismael y Willy nunca coincidieron en vida en el oficio musical. Willy Oddó había sido músico desde niño. Tocaba en grupos folclóricos, estudiaba Ingeniería en la Universidad Técnica y cuando tenía 23 años, en 1967, se integró a Quilapayún. Con el grupo vivió más de veinte intensos años: cinco en Chile, hasta el Golpe Militar, y quince de exilio en París. Allá fue donde, en 1975, nació Ismael, su único hijo con Rayén Méndez, la compañera de toda su vida.
Los tres regresaron primero a Argentina y luego a Chile, en 1989. Tres años después, el 7 de noviembre de 1991, Willy fue asesinado en una calle de Santiago. Ismael tenía 16 años. Tiempo después estudió composición, luego teatro, y en 2003 los compañeros de su padre en Quilapayún lo invitaron a sumarse al conjunto, donde permanece hasta hoy.
Ismael también forjó una carrera solista de dos discos (Bando N°1, de 2011; y Ecce Homo, de 2015), que se multiplicó en muchos otros proyectos, como Colectivo Cantata Rock, Las Últimas Composiciones de Violeta con Ángel y Javiera Parra, Maestro Juba, la colaboración permanente con Álvaro Henríquez, Ana Tijoux, Chancho en Piedra, el grupo Tikitiklip y varios otros.
En medio de eso tomó los cassettes de su papá, que conocía hacía mucho tiempo y seleccionó 10 canciones. La mayoría son zambas argentinas, siete en total, que Willy cantaba regularmente desde los tiempos de la Peña de la Universidad Técnica en la década del ‘60. Una inédita musicalización del poema de Mario Benedetti “Por qué cantamos” y dos tangos completan la lista. Uno de ellos es “Re-volver” -de Eduardo Carrasco y Desiderio Arenas-, que cantaba con Quilapayún, y que narra la melancólica sensación del regreso al país después del exilio: “Volver con tanta espera sin abrir”.
Junto al ingeniero Jorge Fortune, Ismael también mejoró y restauró las canciones, que habían sido grabadas en radiocassettes, en un proceso largo y acucioso. A partir de esa base, puso su voz en algunas, agregó su guitarra e invitó a experimentados músicos, como Raúl Céspedes, Danilo Donoso, Federico Faure, Ángela Acuña, Federico Terranova, Camilo Salinas y DJ Pizza. Con ellos grabó en los estudios del GAM y en estudios Triana, y finalmente mezcló y masterizó nuevamente con Jorge Fortune.
Así nació Canciones con mi Viejo, un disco que tiene a “La zambita de San Rosendo” como la grabación más “nueva” de Willy, la que cantó en la fiesta de despedida que le dio Quilapayún en París, cuando partió a Argentina en marzo de 1988. Willy tenía entonces 44 años. La misma edad que hoy tiene Ismael.
Ismael Oddó – Canciones con mi Viejo
Jueves 19 de marzo – 21:00 horas
Entradas disponibles en ticketek.cl, y sin recargo en boleterías del Teatro y Comunidad de las Artes (Av. Providencia 1266) con descuento para socios.
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