Uno de los grandes clásicos del teatro chileno vuelve a nuestro escenario este fin de semana. “¡Que vengan, que vengan todos!”, exclama Micaela Sandoval Ramírez, la nueva protagonista de «La Negra Ester», quien asegura que una de las claves del éxito de este montaje -con dirección y adaptación teatral de Andrés Pérez Araya, basado en “Las décimas de la negra Ester” de Roberto Parra Sandoval- es que surge desde la emoción.
“‘La Negra Ester’ es una obra súper necesaria para crear un encuentro transversal. Además, es una obra sencilla, que tiene que ver con lo esencial de la vida”, dice Rosa Ramírez, directora de la compañía Gran Circo Teatro.
A días del regreso de esta obra al Teatro NESCAFÉ de las Artes, conversamos con Micaela y con su madre, la connotada actriz y directora Rosa Ramírez, quien tras haber interpretado el rol protagónico por más de dos décadas, lo dejó hace cuatro años para “mirar desde abajo” el trabajo de la compañía Gran Circo Teatro y hoy ve con orgullo cómo su hija ha asumido el desafío de dar vida al personaje.
– Micaela, ¿qué significó para ti asumir el papel que históricamente interpretó tu madre?
Es un desafío, un desafío igual a si me llaman para hacer cualquier papel de la Negra Ester o cualquier otra obra. Lo que pasa es que «La Negra Ester» ya está montada, la gente ya sabe lo que quiere ver y sabe con lo que se va a encontrar, por lo tanto es un placer aún mayor cuando te dicen ‘mira y además tú tomarás el rol de la Negra’.
En mi caso venía trabajando con la compañía hace rato. Estuve en vestuario y luego arriba del escenario haciendo otros roles, entonces tampoco fue tanta la sorpresa, ya habíamos tenido algunas conversaciones. Para tomar la decisión me sirvió mucho el compañero que tengo. Llegó un momento en que me dijo: ‘Micaela, ya está, sólo hay que poner las manos arriba y tirarse el piquero’, y claro, peor era bajarse del trampolín con el pifeo de la galería completa. Había que tirarse nomás. Lo hicimos y creo que hemos salido bastante a flote. Creo que es un trabajo que está bastante consolidado, entonces no es que toda la responsabilidad caiga sobre mí. Afortunadamente comparto escena y la locomotora de este cuento con Tito Cancino, tremendo actor y tremenda persona, y así con cada uno de mis compañeros; cada uno aporta lo mejor de sí. Me sentí súper acogida.
– Rosa, ¿cómo fue dejar el rol protagónico, dejar de ser la Negra Ester?
¡Súper sencillo! Lo pensé muchas veces. Además tenía ganas de ver la obra desde afuera porque ya habían pasado muchos años desde la muerte de Andrés (Pérez) y yo estaba a cargo de lo que pasaba en el escenario, entonces era difícil asumir los dos roles: estar desde afuera mirando y luego estar arriba y que alguien mirara desde abajo. Lo que correspondía era que tomara distancia y sentí que era importante quedarse fuera. Tenía ganas de que alguien asumiera el rol de la Negra con la misma profundidad, amor y enamoramiento como yo lo hice durante tantos años y esa fue la tarea más difícil, ver quién haría este rol. Estuve mucho tiempo mirando a colegas y finalmente fue Micaela quien lo asumió con todas las de la ley. Ella es hoy día la Negra Ester.
– ¿Por qué creen que «La Negra Ester» se instaló dentro de los clásicos del teatro chileno?
Rosa: Imagino, y aquí especulo porque me bajé del escenario hace cuatro años y esto se viene diciendo desde cuando Andrés estaba vivo, que tiene que ver con que es una obra que, sin pasar por “la intención de”, da en el clavo al hablar de un Chile que nos pertenece, de personajes marginales, pero con mucha dignidad y nobleza. Acá nadie ridiculiza ni a las putas, ni a los borrachos, ni al mariconcito. Nadie. Todos los personajes son nobles, con una tremenda grandeza como seres humanos y, como tales, también tienen actos muy bajos, de mucha miseria y eso el público que tiene sensibilidad, el que tiene ganas de conmoverse, lo percibe.
– ¿Y en cuánto a los elementos que podríamos definir como cien por ciento chilenos?
Micaela: Creo que tiene que ver con la picardía, la “chispeza”. Los chilenos somos rápidos… ¡es tan terrible ser chileno hoy en día que no nos queda más que reírnos! Y creo que tiene que ver con eso. Un chileno medio es difícil que tenga una vida para reírse, entonces se tiene que inventar una para hacerlo y ahí entran a jugar todas estas “chispezas” y «La Negra» tiene eso. En ese sentido, la obra no sólo toma lo chileno. Podría haberse quedado con el triunfo nacional pero, sin embargo, rompe las fronteras y sale, viaja. Ha estado mucho tiempo fuera y hasta hoy hay muchas escuelas en el extranjero que estudian la metodología del Circo Teatro y «La Negra Ester». Entonces, ¿será que tiene que ver sólo con lo folclórico y lo tradicional chileno? Creo que va más allá porque al partir trabajando desde las emociones desaparecen las fronteras.
– Rosa, en estos casi 27 años de vida, ¿cómo has visto al público de «La Negra Ester»? ¿Ha cambiado desde su estreno en 1988?
Ha cambiado, claro. Ha cambiado en todos los aspectos. Ahora estamos insertos en un país en donde todo es muy desechable, no hay mucho tiempo para cultivar las amistades, para pajaronear. Hoy todo el tiempo tienes que estar generando lucas. El público es súper distinto, pero podemos estar en la época que sea y el cuerpo va a sentir frío o calor, o reaccionar de determinada manera de la misma forma. Las emociones son parte del ser humano desde siempre y tenemos que trabajar para que no desaparezcan y creo que «La Negra» se da ese tremendo lujo en ese sentido.
– Durante las funciones siempre los acompaña La Regia Orquesta. ¿Quiénes son los músicos que componen la banda?
Ambas contestan casi al mismo tiempo: Fernando Pereira, Matías Moraga (ambos integrantes del grupo Guachupé), José Miguel Cáceres y Piero Rivera.
– ¿Qué significa para ustedes presentar La Negra Ester en el Teatro NESCAFÉ de las Artes?
Rosa: A este Teatro le tengo muchísimo respeto. Creo que han hecho un trabajo súper valioso. Siempre estoy bien atenta a lo que pasa acá porque aquí tienen súper claro cuál es la esencia del producto artístico que están poniendo a disposición del público. Estamos felices, incluso fuimos nosotros los que empezamos a “presionar” para poner una fecha de presentación. Creo que es necesario para nosotros como compañía que dentro de todos nuestros viajes tengamos una parada aquí. Nos gusta y nos va a gustar quizás hasta cuándo.
«La Negra Ester» – Temporada 2015
12 y 13 de septiembre
Entradas a la venta en Ticketek y sin cargo por servicio en boleterías del Teatro, con descuento para socios de la Comunidad Teatro NESCAFÉ de las Artes.