Los retratos de Manet inician serie de notables muestras llevadas a la pantalla grande

El año pasado fue el sorprendente éxito del documental «Leonardo da Vinci en vivo», transmitido desde la National Gallery de Londres a cientos de cines del mundo. Ahora, con el filme sobre la exposición de Manet en la Royal Academy of Arts y luego con las retrospectivas de Munch y Vermeer, parece consolidarse esta nueva tendencia. Su impulsor y director de cine Phil Grabsky y el historiador del arte británico Tim Marlow -conductor de los filmes- conversan con «Artes y Letras».

La historia empieza con la ópera cuando, hace pocos años, las espectaculares producciones del Metropolitan Opera House de Nueva York comenzaron a transmitirse en directo a diversos países del mundo. Los mejores intérpretes del momento -como Netrebko y Fleming, los tenores Flores o Kaufmann- pudieron ser vistos desde la butaca de un cine local y con un sonido e imágenes de alta fidelidad.

La respuesta superó las expectativas: el público repletó los cines. Las audiencias de esa expresión artística, que suelen ser más de élite, se ampliaron notablemente. Hoy las funciones de ópera del Met se transmiten a casi dos mil salas en el mundo y la modalidad es replicada por varios teatros que hacen lo mismo con sus producciones de ópera, ballet y conciertos.

Pero faltaba el arte: las grandes exposiciones del mundo del momento. Esta aventura era más riesgosa, porque se trataba de una muestra estática y no de una representación viva. La experiencia de observar una exhibición de pintura, en un cine, suscitaba sospechas. Había que convertirla en algo muy ágil. ¿Cómo hacerlo?

El reto lo tomó el premiado director de cine y documentalista británico Phil Grabsky, el año pasado, quien se la jugó por llevar a la pantalla grande una de las exposiciones más importantes del último tiempo, «Leonardo da Vinci, pintor de la Corte de Milán», presentada en la National Gallery de Londres.

Filmes que seducen

«Leonardo en vivo» sobrepasó todos los pronósticos: en su estreno no quedó ni una sola silla vacía. Medios como The Boston Globe y The New York Times reconocieron que el hecho traía «implicancias enormes para el público y el mundo del arte».

En Santiago, el documental se transmitió a tablero vuelto y fue tal la demanda que el Teatro NESCAFÉ de las Artes debió dar una segunda función cuatro funciones, rompiendo las costumbres establecidas. El filme en vivo (que aquí se dio en diferido) -con una presentación imponente y sorprendentemente ágil- partía por los alrededores de la National Gallery de Londres hasta llegar al interior del museo. La cinta internaba al espectador por los preparativos de la muestra y se desplazaba por las salas y obras de Leonardo, junto a entrevistas a expertos y figuras mediáticas, acercamientos de pinturas y relatos sabrosos de pasajes de la vida y trabajo de Da Vinci. Uno de los puntos reveladores fue la aclaración sobre las diferencias reales de las dos versiones de la pintura «La dama de las rocas», la del Louvre y la británica, una restaurada y la otra conservada en su original, que muchos pensaban que eran iguales.

Grabsky, para darle aún más agilidad al filme, puso al mediático historiador del arte británico y director de exhibiciones de la White Cube -Tim Marlow- como conductor.

Ambos contaron a «Artes y Letras» que han trabajado muy intensamente en ello, «con el fin de que estas producciones lleguen a un público lo más amplio posible y se sientan atraídos hacia este mundo maravilloso». Grabsky precisa que «busco hacer vivir el arte en ellos y consolidar esta manera de llevar las exposiciones a la pantalla grande».

Este mes empieza un ciclo de notables muestras llevadas a la pantalla grande, que será transmitido a 30 países del mundo. La serie -«El gran arte en escena»- acaba de estrenarse en algunas ciudades con la exposición sobre «Los retratos de Édouard Manet», en la Royal Academy of Arts de Londres, la que será transmitida aquí en el Teatro NESCAFÉ de las Artes, el domingo 5 de mayo.

Luego sigue un documental sobre los 150 años de Edvard Munch y la mayor muestra montada en museos de Noruega sobre este precursor del Modernismo. Y en octubre podremos ver la esperada muestra sobre el maestro holandés Johannes Vermeer, en la National Gallery de Londres. El ambicioso plan de Grabsky es llegar a producir cinco documentales de arte al año.

El asunto es que la BBC de Londres ve este hecho como el inicio de una tendencia. El diario The New York Times lo analiza ya como un fenómeno. El periódico se refiere a las oportunidades que estos documentales ofrecen al «examinar el arte en forma ágil y con gran detalle. Grabsky permite que su cámara se detenga durante 30 segundos sobre las maravillosas telas de Manet. Los espectadores -con un fondo musical de Chopin y Schumann- pueden disfrutar las pinceladas del maestro».

El historiador Tim Marlow agrega que «esta cinta sobre Manet ayudará a ver cosas que nunca habían sido vistas antes».

Otros museos siguen el ejemplo: el British Museum producirá un documental en vivo, en junio, sobre su actual muestra de Pompeya. Se comenta que «Pompeya en vivo» será menos sofisticado y producido que los filmes de Grabsky, pero el público tendrá una participación más activa durante la transmisión en vivo.

El director británico deja en claro «que esto no es una competencia con ellos ni menos con las exposiciones mismas. Yo hago filmes sobre la creatividad humana y estos tres documentales constituyen grandes ejemplos y esperamos poder seguir proyectando las mejores exhibiciones del mundo en los años que vienen», afirma.

Grabsky: «Queremos consolidar el fenómeno»

Phil Grabsky ha obtenido numerosos premios por otros documentales como «En búsqueda de Mozart» y «Beethoven», y recibió 12 distinciones por una película sobre Afganistán.

-¿Cuál ha sido el principal desafío ahora al enfrentar el mundo del arte ?
«Lo primero que busco es que los documentales sean de calidad y lo suficientemente seductores para llegar a la mayor cantidad de público, y así poder consolidar esta manera de llevar el arte al cine. Hay que trabajar duro en las biografías de los artistas, que son muy diferentes en el caso de Manet, Munch y Vermeer. Tenemos que estudiar y observar con mucha atención las exposiciones sobre ellos y decidir luego cuál es la mejor manera de presentarlas en el documental».

-¿Cuáles son los recursos principales que utiliza para sacar a la pintura de su aparente quietud?
«Uno de los aspectos más interesantes es el hecho de que la tecnología de la cámara es cada vez mejor. Ello ayuda mucho para recrear la exhibición y moverse por las salas, realizar acercamientos y cruces. Permite, en definitiva, que los espectadores puedan ver ahora, desde sus cines o teatros, una asombrosa aproximación al trabajo del arte».

-El documental que hizo sobre Manet ¿comparte la línea curatorial de la Royal Academy of Arts?
«El filme y la exposición giran alrededor de los retratos de Manet, que constituyen la parte más potente del artista francés. Pero el documental también mira la extensa trayectoria del pintor, pasa revista a otros artistas de su tiempo y al París de mediados del siglo XIX».

-El próximo filme será sobre la gran retrospectiva que celebrará los 150 años del nacimiento de Munch, en Oslo. ¿El eje será ahí la estrecha relación entre la vida y obra del artista noruego?
«En gran parte, porque el trabajo de Munch y su vida están íntimamente unidos. Hay que conocer su biografía para entender su trabajo. ‘El grito’ y la mayoría de sus pinturas conllevan la historia de su vida y experiencias».

-Y la muestra de Vermeer, ¿por qué se abordará en relación a la música?
«La música es muy importante en cualquier filme y en este se le dará una atención especial, como ambientación de su época. Estamos trabajando para el documental «Vermeer y su música» con la mundialmente famosa Academia de Música Antigua, para filmar y grabar la música de los tiempos del gran pintor holandés de quien se conocen solo muy pocas pinturas».

Grabsky asegura que el documental de Manet que veremos trae aportes inéditos. El filme ha sido muy valorado por diarios como The New York Times. Mientras The Guardian, junto con destacar «su sonido e inteligencia», repara acerca de una cierta densidad en algunos comentarios. En todo caso, según consigna la mayoría, las grandes muestras llevadas a la pantalla grande son un fenómeno que llegó para quedarse. Y como nos confiesa Grabsky, «el arte tiene un poder que puede llegar a cambiar vidas y estoy seguro de que cambia las mentes. Esa es la razón, en lo más profundo, de por qué estoy haciendo estos filmes».

Tim Marlow: «Manet emerge aquí como el más complejo de los artistas»

El mediático historiador del arte Tim Marlow es otra pieza clave de estos documentales. Él participa en los contenidos -junto a los directores y curadores de los museos participantes-, además de ser el conductor de estos filmes. Marlow revela a Artes y Letras que el mayor desafío en los contenidos del documental sobre Manet que veremos en el Teatro Nescafé de las Artes ha sido «intentar develar al pintor a través del pretexto de las pérdidas familiares, que refleja en los retratos. Y también poder transmitir algo del poder que emanan esas magníficas obras al estar frente a ellas.

«El filósofo alemán Walter Benjamin habló acerca de los trabajos de arte que tienen un aura y que han sido amenazados por la reproduccion mecánica (fotografía y cine). Espero que la tecnología sea aquí una puerta de entrada a las vulnerabilidades y fragilidad, al poder y el pensamiento que una pintura pueda contener», agrega.

-¿Y cuáles son las más recientes investigaciones sobre Manet, que incorporaron en el filme?
«Los retratos contienen gran parte de sus principales complejidades. Ello reside también en el enigma que tienen algunas de sus mejores piezas, pero aunque intentemos decodificar esos cuadros, en los misterios se mantiene parte de su poder. Manet emerge aquí como el artista más complejo que los historiadores del arte hemos encontrado hasta esa época. Y aunque él fue claro en su papel como padre de los impresionistas y del arte moderno en general, el filme incorpora además sus ideas tomadas en movimientos como el Realismo, liderado por Courbet y otros. Manet es una figura a menudo difícil de localizar en un movimiento o estilo particular».

-En cuanto al próximo filme sobre la exposición de los 150 años de Munch, ¿qué nos puede adelantar?
«Todavía no he visto las galerías en Oslo ni está terminado el montaje. Pero pienso que es demasiado fuerte la posición de Munch como una figura fundadora del Modernismo. Y uno de los aspectos más esenciales de él es su vida. Su madre murió cuando era muy joven y su padre era un cristiano fundamentalista. Munch sufrió un severo quiebre mental, pensó en el suicidio. Y será muy importante para el documental que logremos entregar el balance correcto entre su autobiografía y sus pinturas. Porque muchas veces se lee su obra solo a partir de su autobiografía, en términos de su estado mental y de sus experiencias personales».

Reportaje publicado por CECILIA VALDÉS URRUTIA en Artes y Letras de el diario El Mercurio, el domingo 21 de abril de 2013.

Exhibition: Lo mejor del arte en pantalla

MANET: domingo 5 de mayo – 12:00 horas
MUNCH: domingo 30 de junio – 12:00 horas
VERMEER: domingo 13 de octubre – 12:00 horas

Precios: $ 7.000 y $ 10.000 pesos.
A la venta en boleterías del teatro y por Ticketek.

Abonos para todo el ciclo: $ 16.800 platea alta y $ 24.000 platea baja (sólo en boleterías del Teatro).

➔ 30% de descuento en los abonos para los miembros de la COMUNIDAD TEATRO NESCAFÉ DE LAS ARTES, presentando en la boletería del Teatro el cupón de descuento. Válido hasta el 7 de abril.

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