La cantante Elena Roger, una de las artistas argentinas más destacadas del último tiempo, actuará junto a el sexteto Escalandrum en el Teatro NESCAFÉ de las Artes, el domingo 30 de julio, con un espectáculo que redescubre la música de Astor Piazzolla.

«Pasamos por un montón de etapas, desde lo dulce y suave a lo poderoso. Es una bomba», asegura Roger sobre el espectáculo que llega pronto a Chile.

3001 Proyecto Piazzolla es el nombre del disco y el show que presenta en vivo las obras más famosas del compositor argentino con un sonido original y actual, gracias al trabajo del conjunto liderado por el baterista Daniel “Pipi” Piazzolla, nieto del insigne creador trasandino.

«Siempre digo que los espectadores son afortunados porque están escuchando algo como si lo tocara el mismo Piazzolla, porque es de la misma sangre», adelanta Roger desde Buenos Aires, a sólo días de viajar a Santiago.

La alianza de la cantante con el grupo partió en 2012 cuando Roger protagonizaba el musical ‘Evita’ en Broadway y Escalandrum tenía un concierto programado en Nueva York. «Los fui a ver. Me enamoré de inmediato y dije: ‘ésta es la banda con la que yo quiero cantar’. Luego tomamos un café y quedamos en buena onda», recuerda la artista.

«Siempre quise cantar el repertorio de Piazzolla pero no encontraba la banda ni definía en qué formato hacerlo. No quería actuar con una orquesta típica», relata Roger. Eso, hasta que en 2014 fue invitada a cantar al Museo de Arte Contemporáneo de Mar del Plata. «Los músicos que conocían estas canciones no podían ir. Entonces la organización me dijo que iba a estar Escalandrum y me preguntaron si quería que me acompañaran. Les respondí que sí», cuenta.

– ¿Cómo fue ese primer encuentro con Escalandrum?

Ensayamos durante 15 días de una forma particular: ellos estaban en Buenos Aires y yo en Ushuaia. Me mandaron las grabaciones de las canciones y yo las cantaba encima. El primer encuentro fue el día del show, en la prueba de sonido. Salió increíble. Luego hicimos la presentación ante unas cinco mil personas y fue hermoso.

– ¿Cómo nació la idea de 3001 Proyecto Piazzolla tras ese show en Mar del Plata?

Nos dimos cuenta de que no sólo la música había logrado una calidad suprema, sino que también nos llevamos bien como personas. Hicimos algunos eventos privados y luego decidimos grabar el disco en 2016, dándole prioridad al proyecto.

– ¿Hay algo que redescubriste en este proyecto?

Redescubrí situaciones. Creo que uno va madurando, sobre todo como actriz. Eso me sirvió para interpretar y entender más las letras de Horacio Ferrer, sobre todo porque tienen muchas metáforas. En otros espectáculos las canté pero no las entendía. Esta oportunidad que me dio la vida de volver a agarrar estas canciones y de reinterpretarlas me emociona muchísimo por sus relatos.

– ¿Cuál es tu momento favorito del show?

Pasamos por un montón de etapas, desde lo dulce y suave a lo poderoso, sobre todo cuando interpretamos «Balada para mi muerte» o «Preludio para el año 3001». Son los momentos donde me siento con más poder, siento que ahí está todo.

– ¿Cómo fue grabar el disco y llevarlo a la puesta en escena actual?

Lo del disco fue genial. Lo grabamos en dos días, algo que no suele suceder. Las voces que dejé como referencia fueron las que quedaron. Entonces, el disco tiene una energía como si fuese en vivo. Transportar eso al vivo real tuvo un único desafío: lo visual. Que fuese armonioso y no tuviera baches. Lo supimos hacer, viendo en qué momento parar, contar alguna anécdota o comentar.

– ¿Cómo es tu relación con Daniel Piazzolla y el resto del grupo?

Nos llevamos bien desde el principio. Daniel tiene muy claro lo que quiere y lo que no quiere. Me dio lugar para renovar versiones y hacerlas propias. Le gusta lo que hago, por lo que me siento segura. Todos estamos pasando por un momento profesional bien tranquilo, los egos están calmados, cada uno en el lugar donde tiene que estar. Meterme en este grupo de hombres que llevan tantos años pudo ser un desastre, y sin embargo, está todo muy bien.

– Finalmente, ¿con qué se encontrará el público chileno que asista al show?

La gente se encontrará con un espectáculo redondo, la música más afianzada y con un repertorio más directo. Es una bomba. Los amantes de la música van a estar muy felices.

Elena Roger y Escalandrum – 3001 Proyecto Piazzolla

Domingo 30 de julio – 19:30 horas
Entradas a la venta en Ticketek y sin cargo por servicio en boleterías del Teatro y en el Centro de Atención de la Comunidad de las Artes (Av. Providencia 1266) con descuento para socios.
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