Es catalogado como el nuevo prodigio del flamenco, y es que en los últimos años Eduardo Guerrero ha conquistado por completo al público internacional con un estilo elegante y trasgresor. Dio sus primeros pasos en este baile a la corta edad de seis años, cuando por cosas de la vida escuchó a Paco de Lucía y Camarón de la Isla. Su madre lo llevó a clases de danza y ahí comenzó una relación que hoy lo tiene como uno de los bailaores más reconocidos de España.

Nacido en Cádiz, tierra con gran cultura del flamenco, llega al Teatro NESCAFÉ de las Artes el 14 y 15 de noviembre a las 20:30 horas, en su primer encuentro como solista con el público chileno presentando “El Callejón de los Pecados”, que es una representación del Callejón del Duende, uno de los lugares más emblemáticos de su ciudad de origen.

Con una carrera en solitario que lo ha hecho merecedor de reconocimientos como el premio principal del Festival Internacional del Cante de las Minas en La Unión, Murcia, uno de los más importantes de la disciplina y que además le ha dado la oportunidad de estar en diversos países del mundo como Holanda, Rusia y Japón.

Conversamos con Eduardo Guerrero sobre sus inicios en el flamenco, su decisión de comenzar su carrera como solista, acerca de su espectáculo y sobre sus anteriores venidas a Chile en la siguiente entrevista.

– Comenzaste tu aprendizaje como bailaor desde los seis años, desde ese momento hasta ahora ¿cómo ha sido tu crecimiento en tu arte?

Pues la verdad es que la experiencia ha sido buena, yo comencé, como bien dices, con seis años y para mí este camino hasta llegar a ser un solista y un transgresor de lo que es el flamenco actual, es algo de lo que me siento orgulloso y satisfecho por todo el trabajo que llevo, desde tiempo atrás en diferentes compañías intentando siempre marcar una diferencia o por lo menos distinguirme del resto de los bailaores actuales.

– ¿Cómo fue la decisión de comenzar una carrera solista?

Porque ya pasé el tiempo de diferentes compañías y tenía la necesidad, y me creía capacitado, para poder dar comienzo a una carrera en solitario. Siempre creí que sería difícil, igual que todos los comienzos que son difíciles, pero ya estaba suficientemente preparado para estar al frente de mi propia compañía y creo que fue una de las decisiones más bonitas que he tomado en toda mi vida. Al principio parecía que no lo iba a conseguir, que todos iba a ser muy difícil, por el estado en el que me encontraba y que las compañías con las que giraba eran de primer nivel, y fue probar suerte con mi primer espectáculo, con “De Dolores”, que fue un pequeño homenaje que le hice a la persona que me llevó por primera vez a estudiar el flamenco. A través de ese momento decidí tomar las riendas de mi carrera en solitario, y la verdad es que ha sido un no parar de mucho éxito. Estoy muy orgulloso y contento del camino que se está creando.

– ¿Habías estado antes en Chile como parte de otros espectáculos?¿Algún recuerdo del país?

Sí, he estado ahí en Chile con la compañía de Eva Yerbabuena, he estado en varias ocaciones. Es que participé en esa compañía durante 11 años y la verdad es que tengo muy buenos recuerdos de haber trabajado con Eva, muy gratificante mi paso por la compañía. Lo que vivimos ahí en Chile fue asombroso, puesto que el público chileno es muy agradecido y muy entregado al flamenco. Hay mucha afición, hay mucha gente que está deseando que presente ahí, que pronto puedan ver mi trabajo en Chile y ya lo recibo por las redes sociales en diferentes grupos que tenemos de artistas, que hay mucha expectación, que la gente está ansiosa de que se presente “El Callejón de los Pecados” en Santiago de Chile.

– Has dicho que “El Callejón de los Pecados” es llevar el Callejón del Duende y el Barrio del Pópulo, de Cádiz, a escena, ¿puedes relatar un poco cómo es ese concepto y cómo es ese lugar?

Pues, es una de las partes más antiguas del casco antiguo de la ciudad donde vivo, que es Cádiz, y realmente el título de ese callejón es El Callejón del Duende, aunque nosotros le quisimos poner “El Callejón de los Pecados” porque ahí era donde ocurrían muchos pecados. Era realmente cuando cerraban las puertas a la entrada del casco antiguo de Cádiz, ese era el único paso donde se podía acceder y sólo sabían los gaditanos, los piratas y la gente que andaba transportando la mercancía de alimentos, de telas, de armas… era justo el callejón donde ocurrían la mayoría de los pecados y también se cuenta, hay una historia, que hubo una fase de amor, en el callejón del Duende, donde hay un bandolero que se enamora de una piconera gaditana y ocurre su idilio de amor, donde dicen que aún ahora se oyen voces que relatan lo que esa pareja vivió en el Callejón del Duende, que hoy queremos representar como “El Callejón de los Pecados” con la de cosas que ocurrían ahí.

– Se dice que en este show se permite valorar tu alta calificación técnica y tu estética, ¿qué de particular hay en “El callejón de los Pecados”?

Es un espectáculo que, siempre digo, fue creado y pensado en la elaboración de lo que era un callejón. Descubriremos que hay muchos pasadizos por los que tenemos que cruzar, hay muchos juegos de luces que nos ayudan a crear esos espacios, hay unas telas en el fondo donde se pueden proyectar sombras gigante y tamaños más pequeños, donde los mismo cantadores intervienen en la escena, donde puede salir lo que se decía en las cajas de las mercancías donde traían los alimentos y yo realizo secuencias de zapateado encima de esas cajas, donde realmente me desnudo al público y no hay ningún tipo de traje que cubra, simplemente la piel y el cuerpo, poder entregarte en sí al público. Y luego la elaboración de los números son simple y llanamente un concepto muy transgresor y con una identidad que es la que yo quiero marcar en el flamenco como yo lo entiendo, mi flamenco y flamenco guerrero, como se apoda últimamente a mi estilo de baile, le llaman mucho el flamenco del guerrero, es un baile muy duro, requiere mucha técnica, mucho esfuerzo, es una lucha con uno mismo, pero para mi esa lucha me da mucha satisfacciones y muchos premios sentimentales para disfrutar en la vida.

– ¿Por qué elegiste este show para traerlo a Chile?

Creo que es de las propuestas más bonitas que puedo presentar en la primera vez que me presento como solista en Chile. Es un espectáculo donde se puede ver al bailaor, donde se puede disfrutar buena música, buenas luces, buena escenografía. Creo que es una pieza que no va a dejar indiferente a nadie, creo que será nuestro primer comienzo en Chile, pero que será para muchas veces más, entonces no quería que se quedara indiferente, puesto que para mí presentarme en solitario por primera vez en Chile es algo muy importante, sé que vamos a estar a la altura, sé que el espectáculo es lo que la ciudad, el teatro y el público va a querer ver, y al final va a ser gratificante para todos y creo que el callejón es una de las piezas donde más se puede ver a Eduardo Guerrero con la total libertad y desnudez que se puede entregar cualquier artista.

– Estás cerca de viajar en estas horas, cuéntame dónde estarás antes de llegar a Suramérica.

Ahora mismo me queda poco tiempo para salir de viaje, salgo para Singapur, mañana muy temprano. De Singapur viajaremos a Moscú, de Moscú pasaremos a Montevideo, haremos Buenos Aires, Santiago y después llegaremos a Cádiz y esperemos volvernos a marchar, porque pronto tenemos una nueva gira. Pero la verdad es que contento con todo lo que esta pasando en mi carrera y muy contento y orgulloso de poder estar en Santiago de Chile disfrutando, y sobre todo en ese maravilloso teatro que es el NESCAFÉ que vamos a vivir y vamos a poder compartir con tantos chilenos.

Eduardo Guerrero – «El callejón de los pecados»

14 y 15 de noviembre – 20:30 horas
Entradas a la venta en Ticketek y sin recargo en boleterías del Teatro y en el Centro de Atención de la Comunidad de las Artes (Av. Providencia 1266) con descuento para socios.
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