Hoy 11 de mayo, como todos los años, en nuestra sala tendríamos una función de La Negra Ester, nosotros y el público acompañaríamos a la compañía Gran Circo Teatro en un rito para celebrar el día del Teatro en memoria de Andrés Pérez Araya, para traer el recuerdo no sólo de un creador imprescindible del Teatro Chileno, sino un símbolo que encarna una ética artística, una forma de entender la cultura, una emancipación de la creación del poder político, la autonomía de la gestión, la militancia en la belleza, el compromiso con el público como compañeras y compañeros de la reflexión de un mundo nuevo, de una memoria fresca, la caída de los estereotipos, un llamado de libertad.
Hoy 11 de Mayo de 2020 quedará estampado en nuestra memoria como una conmemoración difícil, cruzada por la ausencia y el vacío, escenarios congelados en el tiempo, butacas en compás de espera. Nuestro pensamiento está con quienes entregan y han entregado su vida a la escena fugaz, única e irrepetible, nos sumamos a quienes hoy exigen respeto por esta labor noble, que edifica puentes, que traza caminos nuevos, que une, que incluye, que suma, que estrecha vínculos a través de la emoción y la reflexión. No podemos dejar a la deriva un aspecto tan esencial para la vida de las personas, una nutrición intangible pero vital.
El Teatro es acción colectiva y será siempre un acto de rebeldía, un acto de unión sin banderas, la comunión sin credos, la unidad voluntaria, la invitación a entrar, el aplauso de complicidad y agradecimiento.
Extrañamos el murmullo de la sala llenándose, el silencio en el apagón inicial, las y los artistas entregándose cada día como si fuera un estreno, los aplausos levantando al público de los asientos.
Ya llegará el momento de volvernos a encontrar y anunciarles una vez más que la función está por comenzar.
Andrea Gutiérrez
Directora de Programación
TEATRO NESCAFÉ DE LAS ARTES