“Quedan todos invitados a ver este gran espectáculo, porque el bolero es inmortal: te amarra, te invita, te remece, te estremece con sus historias de amor; un viaje preciosísimo a un lugar con imágenes y sensaciones lindas”, explica el barítono Javier Weibel sobre el concierto teatral “Parece que fue ayer, noche de boleros”, a enamorar este sábado.

Y la actriz/cantante Amaya Forch, a parte de concordar que “el bolero es inmortal”, añade: Más que un concierto, es un encuentro romántico. Inviten a esa persona especial, porque van a tener la posibilidad de pegarse codazos, dedicarse canciones para terminar tarareando, cantando junto a nosotros”.

“Parece que fue ayer, noche de boleros” se desplegará como un típico programa radial sesentero conducido en este caso por un ficticio locutor interpretado por el actor Darwinn Le Roy. ¿Qué piensan sobre participar en un concierto no convencional?

Amaya Forch: Es muy interesante esta propuesta, distinta. No solamente es un concierto. Es un espectáculo con atmósfera, historia, personajes.

Javier Weibel: Tiene la intención de ir hacia atrás, cuando la radio era un importante patrimonio difusor. La gente no solo escuchaba canciones, sino que se mandaba mensajes (…). El montaje está pensado como una máquina del tiempo, con la nostalgia de un repertorio musical universal.

“Los boleros son atemporales. Nos conminan, nos llaman al amor con frases tan profundas (…)”.

Javier Weibel, barítono.

Además de estar envueltos en proyecciones de la productora Unreal Stage.

Javier Weibel: El público se ve inmerso en un viaje multisensorial, porque en pleno siglo XXI necesitan más herramientas que solo sentarse y escuchar. Las imágenes 3D evocan muchas cosas bonitas (…). No quiero hacer spoiler, pero hay más, como interacción con el público…

Amaya, personificas a la cantante Esther Arrigorriaga. ¿Cómo es Esther?

Esther representa a las grandes divas de los años ‘50, con ese halo glamoroso, bohemio. Como antes en esos programas radiales solo se escuchaba la voz, la gente debía imaginarse a quien cantaba, las sensaciones que eso provocaba.

Y Javier, ¿cómo es Pepe Escarlata, “La voz de terciopelo”?

Con Pepe se rescata la imagen del crooner, personaje de las grandes orquestas de aquellos años cuando había cantantes que manejaban muy bien ciertos repertorios, pasando fácilmente de uno a otro (…). Se construía un mito alrededor de sus imágenes, porque poca gente los podía ver en vivo. Daba lo mismo si eras chico o pelado, rubio, alto… yo ahora, al micrófono, soy un adonis.

“Valentín Trujillo es una figura emblemática de la música chilena (…). Con su piano aporta audacia, improvisación, gracia, interpretación, travesura (…), a cada concierto le da un toque”.

Amaya Forch, actriz/cantante.

¿Qué significa para ustedes el bolero?

Amaya Forch: Lo canto desde siempre. Al menos en el mundo latino es el género musical más vigente. Toda persona, desde el más rockero al más reguetonero se sabe algún estribillo. Está en nuestro inconsciente. Es una música simple. Las letras no son complicadas. Hay boleros de enamoramiento, de despecho, de coqueteo. Todos me gustan, porque cada uno cuenta una historia diferente… y a mí me gusta contar historias.

Javier Weibel: Los boleros son atemporales. Nos conminan, nos llaman al amor con frases tan profundas respecto a “quiero construir contigo”, o “no sabría qué hacer sin ti”, o “fue bonito conocerte para volver a nacer”. Hay una relación identitaria.

Van a cantar solos y a dúo leyendas como “Dos gardenias”, “La barca”, “Somos novios”, “Se te olvida” e “Historia de un amor”.

Javier Weibel: El que me encanta, el favorito de todos es “Cómo fue”, una visión tan linda sobre alguien que, mientras mira al amor de su vida, se autopregunta cómo se fue a enamorar. No le achaca nada a ella.

“Parece que fue ayer, noche de boleros” además contará con la participación especial del pianista Valentín Trujillo.

Amaya Forch: Valentín Trujillo es una figura emblemática de la música chilena. Urgente que le den el Premio Nacional de Música. Le tengo mucho cariño. Además de conocimiento, con su piano aporta audacia, improvisación, gracia, interpretación, travesura. No es un pianista muy obediente (risas), porque a cada concierto le da el toque “Tío Valentín”.

Javier Weibel: Con Amaya han cantado mucho. Yo también llevo 7 años haciendo música con el maestro. Conoce el tono de mi voz; conoce perfectamente cómo vamos a modular (…). Con el piano siempre hace variaciones: se expande, repite una parte o cambia tonalidad. Musicalmente hablando es un misterio cómo será su participación…

Parece que fue Ayer: Noche de Boleros

21 de mayo – 20:00 horas (Reprogramación del 23 de abril)
Evento presencial – Acceso solo con pase de movilidad habilitado
Entradas disponibles en Ticketek.cl (Descuento para socios Comunidad de las Artes)