Os Paralamas do Sucesso

Os Paralamas do Sucesso: con las ganas intactas

Son más de 30 años los que lleva Os Paralamas do Sucesso sobre los escenarios y continúa tan vigente como siempre. El trío viene de lanzar su nuevo álbum, Sinais do Sim (2017), y esperan sorprender una vez más al público chileno en su regreso a nuestro país el 9 de octubre.

«Será una muy buena oportunidad para la gente que nos sigue… verán que todavía estamos vivos y con muchas ganas de tocar», afirma Bi Ribeiro

Una carrera intensa en la que han pasado por altos y bajos, pero sin perder lo más importante: la unidad. Por eso Herbert Vianna (voz y guitarra), Bi Ribeiro (bajo) y João Barone (batería y voces) no pierden las ganas de tocar y de reunirse con sus seguidores para contar su historia a través de la música.

Sobre su retorno a los estudios, sus nuevas creaciones, la relación que mantienen con Chile, las dificultades que han encontrado en su camino y las expectativas que tienen de su próxima visita a nuestro país, conversamos con Bi Ribeiro, bajista fundador de Os Paralamas do Sucesso.

– ¿Qué se siente volver al estudio después de ocho años?

Teníamos muchas ganas desde la última vez, pero estábamos involucrados en otras cosas, como por ejemplo la conmemoración de los 30 años de la banda. Para esa fecha hicimos un concierto que pasaba por todas las fases de la banda e hicimos muchas cosas por Brasil y estuvo tan bueno que estuvimos unos tres o cuatro años en eso. Entonces no tuvimos mucho tiempo para volver a componer y juntarnos. Cuando eso terminó fuimos creando, y también en los intervalos de la gira. Era necesario para nosotros para sentirnos artísticamente con vida, porque si no nos quedaríamos tocando siempre los temas conocidos. Era desafiarnos y fue una experiencia muy buena el volver al estudio. Invitamos a Mario Caldato, un productor que es brasilero-americano y que ha hecho muchas cosas acá en Brasil, por ejemplo Marisa Monte, Seu Jorge y Marcelo D2. Lo invitamos y a él le gustó la idea. Grabamos acá en Río de Janeiro en un estudio bien tradicional, así como eran antes, porque los estudios son cada vez más chicos. Este es más antiguo y grande. Luego fuimos a mezclar a Los Ángeles, en el estudio de Mario. Fue una experiencia muy revitalizadora. Mostramos que podemos todavía grabar de la forma que lo hacíamos antes.

– El proceso de creación fue en medio de las giras, en los ratos libres, ¿cómo fue eso?

Tratamos de encontrarnos una o dos veces por semana y de ahí fuimos sacando música y creando ideas. Ese proceso costó más o menos unos dos años, porque fue lento, y ahí llegamos a ese resultado. Cuando nos pareció que había una cantidad de cosas buenas, lo hicimos. De las 20 canciones que hicimos, grabamos 11. Elegimos y grabamos lo que queríamos decir.

– En esa selección final tienen el cover de «Cuando pase el temblor» de Soda Stereo, ¿qué los llevó a elegirlo en la lista final?

Cuando empezamos a salir de Brasil y llegar al resto de Latinoamérica, como Argentina, Chile, Uruguay y México, era un tema que pasaban mucho por la radio. En el año 86 o por ahí. Así que quedó muy marcado en nosotros como el tema de nuestra salida de Brasil, uno de los temas más importantes de esa época. Nosotros íbamos muchísimas veces a Chile, porque mi padre vivía allá en Santiago en los años 80. Íbamos a esquiar y en las pistas de esquí también pasaban siempre ese tema. Entonces es parte de nuestra banda sonora y decidimos hacerlo en este disco.

– Durante estas más de tres décadas se han mantenido unidos a pesar de todo, ¿cuáles crees que han sido los mayores desafíos que encontraron en el camino?

Como en casi todos los países de América del Sur, muchas crisis financieras. Además, las modas de géneros de música que hay aquí en Brasil, ya que muchas veces nuestro género, que es pop rock, está en etapas buenas, pero a veces viene el funk, y otras cosas, y se pone difícil para las bandas trabajar. Pero eso siempre lo logramos solucionar. Otra cosa fue el accidente que Herbert tuvo en 2001, cuando se cayó en su ultraligero en el mar y tuvo una lesión en la espalda. Fue un período muy difícil porque no sabíamos si iba a vivir, pero siempre estuvimos junto a él en el hospital y en recuperación. Apenas pudimos, grabamos un disco y salimos de gira. Creo que eso le ayudó mucho y aún lo ayuda, porque tocar para él es su vida y nuestra vida. Entonces, estar tocando y haciendo las mismas cosas de antes es bueno para todos, y para él muy especialmente, porque puede seguir haciendo lo que hacía antes… y para nosotros porque queremos estar juntos en nuestras vidas.

– Finalmente eso los terminó uniendo más…

Sí, verdad que sí. Además, en esa época de 2001 estábamos juntos y teníamos la intensión de grabar un nuevo proyecto, y en medio de eso pasó el accidente. Luego seguimos como si nada hubiera pasado y más unidos, como dijiste tú.

– Las canciones que hicieron desde sus inicios continuan vigentes hasta el día de hoy, ¿a qué atribuyes eso?

Es porque ha pasado mucho tiempo y muchos gobiernos distintos, pero de lo que hablamos, temas sociales y políticos, no han cambiado en nada. La corrupción es muy alta, entonces el país no camina para adelante, no evoluciona como Chile, por ejemplo, porque cada vez que vamos vemos cómo evoluciona, cómo está más adelantado y la gente es más respetuosa. Aquí nadie mira la educación y entonces eso no nos hace caminar, por eso los temas de los que hablábamos hace 30 años siguen vigentes, porque no ha pasado nada. Cambiaron los gobiernos pero nadie hace nada por la educación. La gente se roba los dineros del país, porque somos un país que genera mucha plata y es rico, pero la gente se la saca toda para el bolsillo, entonces es difícil.

– ¿Cómo describirías la relación que tienen con el público chileno?

Hemos estado un lapso muy grande sin ir, porque en los 80 y 90 íbamos mucho. Después no sé qué pasó exactamente pero nos quedamos mucho tiempo sin ir a Chile, la última vez fue a un festival grande. Pero cuando vamos a Chile somos muy bien recibidos, la gente nos reconoce todavía en la calle y tenemos una relación muy fuerte con el país, porque mi padre vivía ahí y nosotros íbamos casi todos los años. Es una lástima que ya no toquemos tanto, pero esta oportunidad va a ser muy buena para la gente que nos sigue, ya que verán que todavía estamos vivos y con muchas ganas de tocar, que el tiempo no ha pasado. Esas cosas mantenemos: las ganas de tocar cosas nuevas, y las antiguas también, y hacer una fiesta para los que están por ahí.

– ¿Me puedes contar un poco sobre el repertorio que trae Os Paralamas do Sucesso en esta oportunidad?

Sabemos de nuestra historia y la de la gente que nos sigue, entonces tenemos ganas de mostrar cosas nuevas, pero nos encanta también contar nuestra historia a través de la música, entonces vamos a tocar «Alagados», «Óculos», cosas que nos hicieron llegar hasta acá… nuestra historia a través de la música. Tendremos una pantalla atrás con fotografías y videos de otras épocas, y actuales también.

– ¿Qué expectativas tienen de esta visita al Teatro NESCAFÉ de las Artes?

Es una incógnita. Nosotros creemos que tenemos una audiencia buena en Santiago, de la gente que nos sigue, entonces tenemos muchas expectativas pero no sabemos cómo va a ser y estamos muy excitados por ese momento. Lo cierto es que la gente va a encontrar a una banda que tiene más de 30 años de edad y que sigue con el mismo ímpetu desde el comienzo y tiene siempre muchas ganas de tocar, estar juntos y entregarse en el escenario. Eso es lo que hacemos y no tenemos ganas de parar.

Os Paralamas do Sucesso

Martes 9 de octubre – 20:30 horas
Entradas a la venta a través de Ticketek, y sin cargo por servicio en boleterías del Teatro y Comunidad de las Artes (Av. Providencia 1266) con descuento para socios.
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