«Viendo en la cartelera del Teatro NESCAFÉ de las Artes, adonde nos invitaron, que son pocos los conciertos de música clásica, pensamos en un formato más cercano a la música popular. En vez de tocar tres grandes cuartetos serios haremos un programa de miniaturas que será divertido, contrastante y con una unidad temática», comenta, desde Ciudad de México, Arón Bitrán. Este violinista de origen chileno junto con sus hermanos Saúl (violín) y Álvaro (chelo), más el mexicano Javier Montiel (viola), integran el Cuarteto Latinoamericano.
«Miniaturas de América» reúne una docena de piezas compuestas a lo largo de los últimos cien años, desde «Lullaby», de Gershwin, hasta el estreno mundial del Cuarteto N° 3, «Inglés», de Carlos Zamora, pasando por piezas de Manuel M. Ponce, Francisco Mignone y Ástor Piazzola, entre otros. Las obras duran entre tres y ocho minutos y, según Bitrán, «son todas muy distintas, pero tienen en común alguna relación con las músicas autóctonas de cada país. Se afincan en los dos elementos más característicos de nuestra música, que son el aspecto rítmico y la riqueza melódica».
Además, incluyeron arreglos de dos canciones de Gardel: «Volver» y «Por una cabeza». «Son de un violista chileno, que era del Cuarteto Santiago. Cuando niños, teníamos un cassette donde aparecían. Cuando los tocamos en la Konzerthaus de Berlín, un crítico dijo que no solo eran bellísimos, sino que eran una especie de lieder de Schubert, pero de América Latina. Fue impresionante», cuenta.
La larga discografía del conjunto supera los 80 discos, y a mediados de noviembre podrían ganar su segundo Grammy Latino. El primero fue por «Brasileiro. Works of Francisco Mignone», en 2012. «Es nuestra sexta nominación. Es por ‘El hilo invisible’, que grabamos con la cantante mexicana Jaramar, y son versiones para voz y cuarteto de cuerdas de canciones sefarditas españolas antiguas», revela Bitrán.
Mignone es uno de los clásicos americanos que el conjunto se ha dedicado a difundir, para reparar una injusticia histórica.
«¿Por qué no vemos frecuentemente en los programas de las orquestas europeas y estadounidenses, e incluso latinoamericanas, a Revueltas, Villa-Lobos, Chávez, Ponce y Ginastera? Estamos agobiados por el eurocentrismo y muchas de nuestras autoridades y músicos no se han creído que tenemos compositores de un calibre universal», reclama.
-¿Está renaciendo la literatura para cuarteto de cuerdas?
«Estamos cumpliendo 35 años en 2017 y hemos podido atestiguar ese renacimiento que, sin falsa modestia, creo que la existencia de nuestro grupo ha propiciado. A la fecha tenemos más de 200 obras dedicadas y estrenadas. Las ensayamos y tocamos con la misma seriedad con que abordamos a Beethoven o a Brahms. Y eso ha generado en México una gran efusividad del público; nuestros conciertos se llenan de jóvenes. Esperamos que sea también el caso en Santiago».
Entrevista publicada por Romina de la Sotta Donoso en la edición del viernes 21 de octubre de 2016 en el diario El Mercurio.
Cuarteto Latinoamericano
Sábado 29 de octubre – 21:00 horas
Entradas a la venta en Ticketek y sin cargo por servicio en boleterías del Teatro.
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